Podría dejar la lectura
y confundirse con el paisaje
atravesar los campos
impregnarse de su olor
a hierba mojada
descubrir al hombre
que bordea el camino
junto al muro
dejarse
arrastrar
por su sombra.
Podría recordar el sudor
en otra piel
otro país
recordar una habitación
de ventanas azules.
Podría abrir la puerta
al hombre
que regresa de la lluvia
dejar pasar la tarde
oir su nombre en otra voz:
gute nacht, Katharina.
Escuchar el rumor del oleaje
dejar atrás un océano
otro cielo
alcanzar la orilla.
De: El ojo cegado