Era el tiempo de ser niña

Era tiempo de ser niña y trepar árboles
de los rostros sin rostro
los huesos sin nombre
y el duelo y la sangre

era tiempo de ausencias
y el cuerpo de Cristo
y quebrarse la luz en el odio

era el cielo de un dios vengativo
de mi boca invisible
mordaza cosida
en alambre y silencios

y un hielo de frío
y espuelas de hielo en la noche

por el cuerpo de Cristo
y la sangre de Cristo
era el tiempo del dolor del día
(luto de seda negra y pañuelo rojo
en la memoria)

que la paz de Dios
                    descienda
sobre los pecados del mundo

era el tiempo de ser niña
y trepar árboles

decidme ahora
de qué color eran mis pecados.

Ilustración: José Ramón Urtasun


De: Memoria poética. Inspirado en la vida de Pilar García Goñi (✞ fallecida el 03/04/22)

06/11/18: Recitado en la residencia de ancianos de Cáseda.

Deja un comentario