Yo atrapé el instante furtivo de la pesca:
peces flanqueados
entre juncos y estrategias.
Rojos cangrejos fueron devorados
con deleite en ausencia de tarta
¡feliz cumpleaños!
niña de la boca de rana y mediodía.
Caleidoscopio
de un verano de chicharras
y bikinis de flores
(el placer de lo prohibido
en volutas de humo junto a la presa).
En el último clic de septiembre
se fijaron los rostros
que miraban al cielo
aviones plateados
en lugar de las grullas
golpearon el tímpano
dispersando las ovejas.
Todo se precipitó:
del instamatic al vértigo digitalizado.
Me fue negado capturar
el penúltimo baile
a ritmo de twist
de Teresita Ramírez.
Fijar, restituir imágenes: ¡clic! Ahora. La linterna de la memoria, detenida.
De: Ashwayats